«La Sociedad Comprometida»
He quedado realmente sorprendido al conocer que aquí mismo, en nuestra ciudad de Granada, la Asociación de Madres y Padres del Colegio Gómez Moreno lleva años gestionando el comedor escolar de un modo pionero y ejemplar, y han decidido editar un libro que recoge sus experiencias “para enseñar que un comedor escolar puede ser también casero, rico y sano”
El AMPA de este colegio es verdaderamente ejemplar debido a sus numerosas muestras de colaboración estrecha con el equipo directivo del centro escolar, uno de cuyos resultados se concretó en asumir la gestión directa del Comedor Escolar. Casi desde el principio se apostó por el consumo de alimentos de producción ecológica y de cercanía como criterio esencial para lograr una alimentación sana y ecológica, así como se incorporaron diferentes pautas relacionadas con la prevención de la obesidad, la alimentación responsable y el fomento del ejercicio físico entre los alumnos:
“Además de elaborar un menú equilibrado para los escolares –que de paso adquieren hábitos nutritivos saludables de la cultura culinaria andaluza y mediterránea-, realiza talleres con padres y niños de cocina saldable y organiza actividades deportivas semanales al aire libre.”
En definitiva, una comprometida manera de entender al comedor escolar como una parte más del proceso educativo.
¿Por qué un comedor ecológico en la escuela? La información disponible indica que la oferta dietética en los comedores escolares no siempre es consistente con lo que recomiendan las guías alimentarias: “aportes insuficientes en verduras, hortalizas, frutas y pescados son los errores más frecuentes, junto con el empleo excesivo de grasas añadidas en las preparaciones culinarias”.
Enseñar a los niños a comer sano: Como respuesta, este comedor singular ha seguido una serie de pautas bien claras: se ha cuidado la procedencia ecológica de los alimentos entroncando con el programa Alimentos ecológicos para los escolares de Andalucía promovido por la administración autonómica desde 2003: se compran alimentos frescos diaria o semanalmente, se incluyen diariamente verduras y/o frutas, se utiliza básicamente el aceite de oliva como fuente de grasa, se ofrece pescado con frecuencia, y se cocinan en general platos tradicionales, siguiendo las formas y hábitos más sanos de Andalucía, lo que muchas veces requiere procesos muy elaborados. Y todo ello cuidando la presentación, la textura y los colores en base a la experiencia de mejor aceptación de los platos por los niños.
Los expertos coinciden en que la experiencia del Colegio Gómez Moreno reúne muchas de las recomendaciones para abordar el problema del sobrepeso infantil en los colegios, generando hábitos saludables que sin duda alguna constituyen verdaderos activos para la salud y el bienestar.
Los menús del comedor: Durante estos años, se ha ido logrando una evolución continua en la mejora de los platos y en el éxito de estos entre los niños; unas formas, artes y técnicas de cocina que padres y cocineros han decidido trasmitir a través del libro recientemente publicado, en el que de una manera preciosa y entrañable se explica cómo se elaboran los menús semanales, y se incluyen las principales recetas del comedor, con la información adecuada y contadas e ilustradas magistralmente.
En definitiva una experiencia exitosa y ejemplar, y una maravillosa práctica a difundir… Pero es necesario asimismo resaltar que la publicación implícitamente constituye asimismo un grito de protesta ya que todo el proceso na ha estado exento de dificultades de toda índole… Sin ir más lejos, en la actualidad el comedor atraviesa un momento delicado, ya que desde el organismo encargado de las infraestructuras de educación a nivel andaluz se trabaja para uniformizar la contratación de la alimentación de los colegios públicos, fomentando externalizar la preparación de los alimentos a servicios de catering, que hará inviable este modelo de pequeños comedores escolares con cocina propia que se abastecen con productos frescos locales y generan puestos de trabajo en su entorno… “a pesar de que en este caso, el coste diario por niño resulta menor que el que la propia administración paga a las empresas de catering para alumnado con derecho a subvención”
Sirva esta humilde difusión desde La Ciudad Comprometida para expresar nuestro agradecimiento por esta labor, nuestra admiración y todo nuestro apoyo.