Caso, lo que se dice hacerle caso, no es que le hayan hecho mucho. La frase es de las que luego, cuando se sabe lo que ha pasado, se piensa cuánto mejor hubiera estado con la boca cerrada. Fijaros: «Queremos quitar la imagen de que el Erasmus está todo el día borracho y de fiesta». La reflexión es de Beatriz Pérez-Artacho, presidenta de la asociación internacional de estudiantes ESN (Erasmus Student Network) en Granada, que defiende el valor y la importancia en la formación académica y personal para los universitarios que participan en este programa de movilidad.
Esta asociación ha elegido Granada para celebrar su asamblea general anual, que en esta ocasión reúne desde este jueves a más de 600 representantes de la asociación de estudiantes ESN, procedentes de unas 400 universidades europeas.
A mí se me ocurre que solo lo han podido hacer a propósito. Como para jorobar. Que nada más escuchar la frase se organizaron de forma cuasiespontánea y empezaron a rebuscar en los fondos de maletas y armarios sus banderas y con aguja e hilo confeccionaron una megabandera europeísta para pasear por el centro de Granada hasta llegar a Plaza Nueva.
Ellos y ellas, decidieron también rebuscar y colgarse a modo de supercapas sus enseñas nacionales por la espalda, y agarraron cacerolas, cubiertos, campanas, cencerros y hasta alguna que otra vuvuzela recuerdo del Mundial para dar por culo por la calle a toda mecha y en juvenil y lozana procesión estudiantil (Ver el vídeo de los estudiantes por Plaza Nueva).
La Policía, les escoltó sin problemas. Me dice un vecino afectado que le gustaría saber qué hubiera pasado si fueran indignados. A mí también.
Terminaron al filo de la medianoche en la entrada de Santa Ana, subidos al Pilar del Toro haciendo el gamberro. Los vecinos van a ir a comprobar esta mañana si se han causado destrozos.
El problema es que no solo no han pasado de borrachos y escandalosos a sobrios y muditos, sino que la imagen que han dado es lamentable. Habrá que pedir todo tipo de responsabilidades, preguntar quién ha sido el organizador, quiénes eran, de dónde venían y a dónde pensaban ir luego a beber y seguir bebiendo. Qué responsabilidad tiene la Policía y el Ayuntamiento, si les han identificado, si les han denunciado, y qué tiene que decir la Universidad de Granada.
Por supuesto, ardo en deseos de conocer la opinión de Beatriz Pérez-Artacho, la presidenta de la asociación internacional de estudiantes ESN (Erasmus Student Network) en Granada.
Lo que no termino de explicarme es dónde estaba la Tuna durante todo este tiempo.
Y de lo que estoy seguro es de dos cosas:
1.-Va a haber codazos por venirse de Erasmus a Granada en los próximos años
2.-SI yo tuviera veinte años me la juego a que era el de la megabandera