¡Así da gusto!

En el amanecer de hoy, cambié las zapatillas por el teclado para regalarme unos minutos antes de partir, inexorablemente, a otra ciudad para seguir aunando y sumando…

Pincha en la imagen para acceder al artículo completo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *