-Viernes 5 de julio de 2013. Recuerdo como si de ayer se tratase tu cara iluminada de amor y orgullo cuando me viste aparecer con el vestido elegido en aquél ansiado día… ‘parece una princesa’ le dijiste a la abuela a lo que ella replicó ‘es nuestra princesa cocho’ . Yo fui tu princesa abuelito, el día de mi graduación y siempre. Hoy este post te lo dedico a ti, dónde quiera que estés, vivirás en mí, siempre-

¿Hola chic@s cómo estáis? Primero decir que siento este parón de actividad en el blog de verdad. A veces la vida es dura y hay situaciones que nos dejan sin aliento y sin ganas de nada. Sin embargo -y esto es un mensaje para todos- la vida continúa y de nada sirve quedarse estancados en el dolor, así que ¡SIEMPRE hacia adelante!

Dicho esto, ¡vamos al lío! Hoy os voy a hablar de las graduaciones, un día ansiado por todas en el que opino que tenemos que ir preparadas en ‘cuerpo y alma’. El 5 de julio (este sábado) se cumple un año de la mía. Que para los que no me conocen fue en Málaga con ‘bastante calor’ – a 40 grados a la sombra concretamente- . Pero bueno dejando las temperaturas extremas malagueñas aparte, fue un día muy especial y lleno de emociones al que acudí con un original diseño de la casa francesa NAF NAF -que estoy deseando volver a tener ocasión de llevar, porque está a la última esta temporada- de la colección primavera verano de la firma y que -como a todas- me costó mucho dar con él.

Lo primero a tener en cuenta es la fecha, el sitio y sobre todo la hora en la que se celebra el acto. No es lo mismo una graduación por la mañana que por la tarde noche, la vestimenta deberá ser diferente. La mía -por suerte- fue sobre las 8 de la tarde, por lo que teníamos más libertad a la hora de elegir qué ponernos, algo que -de por sí- no es tarea fácil. Todas las chicas del último curso de la licenciatura de periodismo de la UMA decidimos intentar ir de largo ya que la hora y la importancia del evento lo merecían e hicimos un grupo privado en Facebook para intentar no coincidir con los looks, algo que también hay que tener muy en cuenta si estáis pensando en comprar vuestro vestido, mono o traje en tiendas tan masivamente concurridas como Zara o Mango.

vestido-largoYo desde el minuto uno tuve claro que quería ir de largo. Era, digamos, la excusa perfecta para ser princesa o sentirme una actriz de Hollywood por un día. Llevar un vestido largo era sin duda la opción más ‘golosa’ y llamativa de todas, estaba feliz, tenía pensado diseñar mi propio modelo y mandarlo a hacer, iba a recrearme, vaya. La cosa es que fueron pasando los meses y la verdad es que no me decidía. Hasta que un día que estaba en mi casa en Granada y mi madre se plantó diciéndome: ‘Jose, hay que salir a ver vestidos porque se nos echa el tiempo encima’ y tenía toda la razón. Lo malo de las graduaciones universitarias es que como son justo al final de los exámenes finales de toda la carrera, su importancia no nos deja el tiempo necesario para poder planear a la perfección nuestro ansiado outfit, por lo que lo que os recomiendo que seáis prácticas.

Yo puedo decir que de alguna manera no encontré a mi vestido sino que mi vestido me encontró a mí. Estaba ya cansada de buscar, era mediodía, el calor granadino ya no me dejaba pensar con claridad y mi desesperación iba en aumento. Me había probado cientos de vestidos y nada. Hasta que la dependienta llegó con aquel Naf Naf -de tul y lentejuelas- en tonos amarillos blanco y negro que me cautivo. He de decir que no era lo que iba buscando pero aquel vestido de tupidas capas de tul me acabó enamorando. Y es que esto es al fin y al cabo, como el amor, llega cuándo menos te lo esperas.

Opciones hay miles. Vestido largo o corto, de corte imperio, silueta de sirena, modelos drapeados…monos cortos, largos o incluso trajes de chaquetas tipo smoking. La elección tiene que ser muy personal y el look tiene que definirnos, debe hablar de nosotras, de lo que somos. Como creo que ya he dicho en alguna otra entrada los monos largos son, sin duda, la única opción cómoda y elegante y sobre todo una prenda que le podréis dar mas usos posteriores, algo que -por ejemplo- con un vestido largo se complica. No hay que descuidar ningún detalle. Yo en cuanto tuve el vestido estuve casi un mes buscando los complementos ideales. Es una elección muy complicada, pero ya os digo que cuando se os presente la vuestra, sabréis que es esa. No lo toméis a la ligera, hay que pensar que son imágenes de nuestra vida que quedarán para la posteridad y que todos recordarán.

430xvestido-largo-pplanoEl peinado no es menos importante, de hecho forma parte del look elegido y tiene que ir en sintonía con nuestro atuendo. Es el momento de arriesgar un poco, de atrevernos -por ejemplo- con algún recogido, ondas…aunque también es cierto que si optamos por nuestro peinado habitual iremos a lo seguro. Yo recomiendo un semirecogido, con alguna trenza o con el pelo cardado u ondulado. Creo que es muy favorecedor y si es a un lado nos permitirá poder llevar unos favorecedores pendientes largos que creo que son sin duda la mejor elección.

Y por último y al final no menos importante, toca prepararnos emocionalmente para lo que va a suponer -creánme- un antes y un después en nuestra vida. Las graduaciones suponen el cierre de una maravillosa etapa y se abre otra muy diferente y difícil, llega la realidad. Salimos al mundo real y se abre un camino lleno de nuevas posibilidades que, a veces, tiene espinas. Así que lo fundamental es disfrutar de ese día con toda la ilusión del mundo y rodearnos de todos nuestros seres queridos. Dicho esto, os dejo con dos fotos -además de las mías- de los dos grandiosos looks que llevaron dos de mis mejores amigas que acabaron hace poco, a ver si os inspiran ¡Felicidades graduadas!

 

amigas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *