Un relato corto y breve sobre los intríngulis de las votaciones en el PSOE de Granada para elegir los delegados para su Congreso Provincial, que se celebra el día 14 de julio. Está basado en la fina crónica política de Carlos Morán de hoy en la edición impresa y en unas cuantas llamdas telefónicas con conversaciones con los protagonistas. Pero, recordar, es un cuento para este verano.

Ilustración de un títere

Érase que se era, aunque también es válido comenzar con un ‘saben aquel que diu…’ una organización política de un partido nacional que tenía que elegir a su nuevo líder. O lideresa.

El día de la elección se puede elegir entre tres listas. Por eso, este es el cuento de las tres listas.

La primera lista es la que apoya a la actual secretaria general del PSOE de Granada, Teresa Jiménez, que se presenta a la reelección. Es también conocida como la lista de Chema Rueda, el jefe del PSOE en la capital de Granada. En una palabra, es la lista oficialista que confecciona Chema Rueda, jefe local, para Teresa Jiménez, jefa provincial.

Puedo decir que el otro día me pasé por el grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Granada y mientras charlaba con las concejalas Ana y Jemi, y conocía de paso a la bebeta de esta última, una recién nacida que está para comérsela con sus mofletes y su carita, Chema Rueda se afanaba en pasar a limpio la lista sin levantar la cabeza y, cuando terminó, la levantó para decirme: «Javi, para que luego digan que aquí en el PSOE se imponen listas».

La segunda lista es la de Luis Salvador, una persona que, debo decir, merece todo mi respeto. Fue la persona que nos llevó a la directiva de la APDA-Asociación de Periodistas Digitales de Andalucía al Senado a intrervenir ante la Comisión de Sociedad de la Información para explicar el estado de Internet en Andalucía. Fue una experiencia y fue todo un honor que ahora, como antes, agradezco personalmente.

De largo conozco su actividad y entiendo que Luis Salvador comparte la máxima de Jefferson:  «Los problemas de la Democracia se resuelven con más democracia», y al calor de la revolución tecnológica, de la Política 2.0 y del deterioro del compromiso de los partidos con la sociedad a la que sirven, me explicó el otro día en Atarfe durante el congreso extraordinario provincial que «necesitamos el voto directo para elegir al secretario general».

La tercera lista, misterios de la vida, está montada por la otra persona que más nos ha ayudado siempre en la mencionada APDA, Manolo Pezzi, aunque en cabeza va Néstor, un tipo preparado, que no es poco, y con una cualidad que le encaja con el nombre: es honesto.

Los resultados han sido.
.-Lista 1-122 papeletas, 51%-Teresa Jiménez
.-Lista 2-73 papeletas, 30%-Luis Salvador
.-Lista 3-41 papelatas, 17%-Néstor Fernández.

Tras este paseíllo por el bosque llegan los momentos de la tensión, los que enganchan al lector con los personajes. En este cuento de las tres listas hay que explicar las razones por las que existen y los personajes que las han impulsado y por qué.

.-La lista número 1 ya la hemos definido: El jefe de la ciudad Chema Rueda para la secretaria provincial que se presenta a la reelección Teresa Jiménez.

.-La lista 2, la de Luis Salvador, la monta porque ya era de la tercera vía con el grupo que logó colar a ZP como secretario general. Luego, lógicamente, apoyó alto y claro a Chacón y, si con ZP ganó pero no gobernó; ahora con Chacón perdió, ya que ganó Rubalcaba; pero ha dado un paso demoledor hacia el futuro. La carambola de este caso es que en Granada y Andalucía todos iban con Chacón contra Rubalcaba y ganó Rubalca. Pero luego Griñán le ganó las andaluzas a Arenas y como que todo el mundo se puso a silbar. Ahora llega el tiempo de los aullidos. Prosigamos.

.-La lista número 3, la encabeza Néstor Fernández pero detrás está Manolo Pezzi, uña y carne de Teresa Jiménez, su principal valedor. La lectura que tiene más lógica es que es una lista prefabricada para fastidiar la candidatura de Luis Salvador. Otra lectura es que es una lista para molestar a Chema Rueda. Lo primero es lo que sugiere Luis Salvador y lo segundo es palabra de Chema Rueda. De ellos o de los que bien les conocen, claro está.

¿Cuál es la solución?
La que no es lógica. La tercera lista se ha prefabricado para molestar a unos y a otros. No solo a uno de ellos. Para fastidiar a Luis Salvador pero también a Chema Rueda, a quien se responsabilizaría del mayor o menor éxito de la lista que confecciona para Teresa Jiménez o del mayor o menor fracaso del propio Luis Salvador.

La pregunta del millón
¿Quién cranea la tercera lista para fastidiar a Luis Salvador y a Chema Rueda?
Pues alguien que está en todo lo alto de la primera lista.

¿Y cuál es la moraleja?
Pues si la primera lista ha duplicado a la de Luis Salvador que ha logrado pasar el corte (que es el 20%)  y la tercera lista se ha hundido… No queda más remedio que concluir que la moraleja es que en el cuento de las tres listas el tiro ha salido por la culata a la persona interesada y responsable de la primera lista que prefabricó la tercera lista con el fin de incomodar en lo posible al responsable de la primera lista (Chema Rueda) y al de la segunda lista (Luis Salvador).

MÁS INFORMACIÓN
.-Carlos Morán este sábado para Ideal.es: ‘El PSOE de Granada apoya a Teresa Jiménez y Luis Salvador sigue en la lucha

4 comentarios en El cuento de las tres listas

  1. Esclarecedor cuento, del que salen mil moralejas.
    Me quedo con esta: la sociedad española ve en la clase política el segundo problema nacional, tras el paro. ¿Por qué será? Comprendo que una organización política tiene un funcinamiento complejo, pero debería ser veraz, honesto y claro: el lugar más transparente. La realidad es otra cosa. Un cuento, como tú señalas.

    Buen artículo, Javier.
    Un abrazo

    AG

  2. Demaisada gente con demasiado tiempo para tocarse los eggs.
    De todas esas listas para molestar, para ser molestados o para molestar al molestador, el noventa por ciento deberían volver al noble arte del azadón en la viña y ganarse el pan con el sudor de la frente, en vez de estar ahí confeccionando listas para evitar que se moleste al molestador que molesta al molestativo… con el dinero de nuestros impuestos, claro.

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